domingo, 24 de mayo de 2015

Descansar está sobrevalorado. De fiesta en fiesta

Semana movidita ha sido ésta porque además de mi particular maratón de 11 días seguidos trabajando con cambios de turno mediante, pero bueno, no hemos venido a hablar de mi trabajo libro, o por lo menos no solo de ello, ya que la semana ha sido intensa también desde el punto de vista social, en primer lugar porque parece que éstos días todo el mundo venía a Madrid, así que maremagnum de visitas con todo lo que ello conlleva de compromisos sociales y eso teniendo en cuenta que la mayoría de los días no podía dormir más de 6 horas.


Bueno, tampoco diría yo tanto, pero si que ha estado ajetreada la cosa y había que dividirse, así que el Miércoles a La Latina a juntarnos con los guiris borrachines, que hay que ver con los universitarios que salen todos los días a muerte así que había que seguirles el ritmo, el Jueves arrastrando ya un poco los píes, a Lavapies (toma rima) lugar que llevo mucho tiempo reivindicando para todos aquellos que están un poco harto del chuequerio, perfecto para tapear y de los que gustan salir a sitios animados pero en los que se puede tener una conversación sin dejarte la voz a gritos, y el Viernes tras pasar un día en el que pensé que era incapaz de mantener la cabeza sobre mis hombros debido al sueño acumulado, a Chueca, con visita incluida al nuevo bar de osos que ya os contaba el mocho, es pronto para decir nada sobre el sitio, las copas a buen precio, el local pequeño, estrecho y oscuro, como casi todos los de chueca por otra parte, no montaran un buen local alguna vez para no estar como sardinas en lata, en el aspecto oserio, pues poca cosa la verdad, mucho barbita perfilada y camisetas apretadas para marcar biceps pero el tema osuno como tal bastante flojo y sobre la música pues no puedo decir nada porque tenían día pre eurovisivo que supongo que no será lo habitual, pero estuvo divertido recuperando las actuaciones más chonis, como los mariqutísimos ¿gemelos? de Irlanda en 2012.


Y eso me vale para hilar para uno de los puntos fuertes del fin de semana, la fiesta eurovisiva del Sábado (por suerte ya tras dormir la noche anterior como un auténtico animal) en la que nos juntamos más de 30 personas con apuestas incluidas sobre los ganadores en la que estuve a punto de ganar. Sobre el festival, pues Driver GT os lo explica mejor que yo, pero aquí unos pequeños apuntes:

- La gala, aburrida, muy aburrida, las canciones muy monótonas, ninguna coreografía ni escenografía arriesgada o que destacara y es que aunque los eurofans renieguen de ello hay que reconocer que esto sin algún puntito friki se queda muy soso.

- Las puntuaciones españolas que ya se han convertido en uno de los puntos a seguir, pues como siempre, pasamos del Oit Points al Go Tu. El resto de puntuaciones, pues desde el payaso micolor de ¿Albania? (bueno seguro que sabéis de quién hablo) hasta la Yoko Ono de Australia.

- Ganó Suecia como ya anticipaban las apuestas con una canción que no vamos a decir que es un plagio pero si ciertamente con reminiscencias al Lovers in the Sun de David Guetta.


En el podium le siguieron Rusia (que por cierto fueron de nuevo abucheados, algo que me da se va a convertir en tradición), con una canción que no estaba mal pero bastante genérica e Italia con la marca blanca de Il Divo, que si llegan a ganar hubiera sido para replantearse mucho el volver a ver ésto.


Sobre el resto de canciones, pues mis preferidas, en primer lugar y sin ninguna duda Australia, en mi opinión la ganadora moral del concurso, no solo por la canción, si no por la cantidad de puntos logrados sin el ya consabido tejemaneje de votos a los vecinos. Me gustaron bastante también Eslovenia con la chica de los cascos, el pianista mohicano y la violinista sin violín con una canción muy movidita, Bélgica con una muy buena canción pero que pedía a gritos un baile mucho más potente y no esa coreografía tan sosa. Reino Unido que apenas tuvo votos pese a ser probablemente la más divertida y tener ese momento luces que fue de lo más destacado / hortera (que en el fondo es lo que anima el cotarro) de la noche. Sin gustarme tanto los chicos de Israel por lo menos intentaron algo diferente por lo que les colocó en el último lugar de mi top5.


Nuestra Edurne, pues no lo hizo mal la chiquilla, teniendo en cuenta que a mi la canción no me gustaba nada pues hay que decir que tuvo una buena actuación pese a que se le escapó algún gallo que otro #ieieeeoo, pero vamos en el tono soso medio del festival.


En fin, ya tras la fiesta eurovisiva, hoy sin descanso a por otra fiesta, pero esta vez la de la democracia (toma topicazo) porque aquí estoy yo como loco haciendo zapping siguiendo todos los especiales electorales televisivos y actualizando varios periódicos digitales a la vez intrigado y a la vez emocionado ante la probable caída del bipartidismo y sobre todo deseando la derrota de la representación del mal en la tierra nuestra querida Espe, vamos que otra noche que me acuesto tarde y mañana a madrugar de nuevo, y la semana que viene hay festival de cine, aiiinnnsss ya descansaré otra semana.


12 comentarios:

  1. Permíteme que obvie lo que me ha parecido Eurovision este año porque ya lo he dicho en twitter y en un par de comentarios a otros blogs.

    Lavapiés está muy bien pero siempre me ha tirado mucho Malasaña que aunque ya no es lo mismo que hace unos años sigo yendo como el que va a Lourdes.

    ¿El festival que dices es el Nocturna? Porque aunque el miércoles empiezo los exámenes y luego los horarios casi acrobáticos del trabajo no me lo pienso así que seguro que coincidimos.

    Ah, y por Espe no te preocupes, seguro que si gana algún pacto le quitará el caramelo.

    Abrazotes y buena semana.

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    1. Dime que este fin de semana sigue estando!

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    2. Yo también iba mucho a Malasaña y de vez en cuando sigo volviendo, hay locales a los que creo que he ido toda mi vida y por supuesto sigo repitiendo. El Festival es el Nocturna si, que de momento digamos que está regular, el fin de semana decidirá su nota, y si Mugen, dura hasta el Domingo por la mañana.

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  2. Aburrimiento eurovisivo. No daban ganas ni de tuitear

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  3. Yo solo vi a partir de la actuación de Edurne y las votaciones, pero por lo que leo por todas partes creo que me ahorré un coñazo soberano, jeje.
    Lavapiés no lo conozco, las pocas veces que voy a Madrid siempre me llevan por el Chueca de los coj...así que tengo una perspectiva limitadísima del cotarro madrileño, claro.
    Y la Espe es que me hace hasta gracia porque parece una mala de película, que mujer más terrible...¿será familiar del Grinch? :-)
    Abrazos y feliz semana. Y que no te exploten mucho laboralmente, hijo...si te contase que mes me he cascao yo, ufff

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    1. Pues hiciste bien, te ahorraste un rato de aburrimiento, a mi Lavapies me parece una zona muy curiosa, más tranquila pero a la vez divertida también. La Espe es una auténtica hija ... bueno digamos que si, es la mala de la película, que manía la tengo. Abrazotes majo

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  4. En el mundo rural del cual me rodeo no hay bares de osos, así que me tuve que conformar con pasar un día campestre en una chopera (aunque no lo pasé mal ni mucho menos).

    De Eurovisión no vi más que las votaciones. de todas formas, con lo extenso y minucioso de las crónicas que hacéis por aquí no me ha hecho falta ;-)

    Y la foto de Esperanza "Agrinche" no tiene precio, jajajaja.

    Un saludo.

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    1. Oiga pues no está nada mal lo de la chopera,a veces la vuelta a lo rural viene bien, lo que sea por cambiar de aires, los de campo a la ciudad y viceversa.
      Abrazotes

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  5. Lo que nunca he hecho es ir a un bar en el que haya fiesta eurovisiva, y tengo ganas ya.

    Los Jedward mencantaaaaan.

    Viendo el nivel de inglés de los que ponemos a dar las puntuaciones, casi mejor que no ganemos nunca. ¿A quién íbamos a poner a presentar la gala?

    Y sí, yo también me acosté tarde ayer, pegadito a interné y los periódicos digitales para ver los resultados... Y parece que las dos más malas se quedan fuera. Recupero mi fe en la humanidad.

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    1. Yo tampoco he ido a un bar con fiesta, no se yo si el chonismo ya sería excesivo, los Jedward me parecen los más divertidos de los últimos años, ahí lo dejo. Por lo de los presentadores no te preocupes, entre el rollo de las puntuaciones interesadas y las canciones que llevamos no creo que ganemos en las próximas décadas.
      Con el tema electoral yo lo estoy disfrutando con la caída de algunas viejas glorias de la España más casposa.

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  6. Ainsss... pues yo me lo pasé muy bien un rato en la cena con dos amigas en casa. Tuvimos un bajón a mitad de noche eurovisiva y luego llegó l'apotesis con la presentadora australiana, que nos revivió a todos.

    ¿A nadie le gustaban las canciones de Estonia y Noruega? Me siento incomprendido.

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