Viejoven

Viejoven:
 (Del lat. viejovenis)

1. Dicese de esa persona que aún en una edad temprana tiene costumbres tranquilas y rehuye de la fiesta nocturna.



2.

Hace una hora que he empezado a escribir éste post, pero no he parado de ver vídeos de Ojete Calor en bucle, entiendo que es posible que os haya pasado lo mismo y ni siquiera hayáis llegado aquí, si es así lo entenderé, para los que habéis sobrevivido a la hipnótica melodía de ésta banda que es leyenda ya de la música española, vamos a hacer un Previously On, o un Anteriormente en, para los que veían Lost en español y es que en el último Chazameando os prometía que os iba a hablar de mi última salida nocturna con consecuencias que mezclaron el alcohol, la vergüenza ajena, las drogas y la sangre.

Hace poco más de un año me cambiaron de departamento en el trabajo, cosa que no os conté porque creo que estaba inundando el blog en demasía con mis marrones laborales, y eso que ésta vez ha sido para bien, aunque eso no quita que tenga que seguir aguantando a mi insoportable jefe, su mejor y su cuadrilla, en fin, que me lío, que en el nuevo departamento hay bastante buen rollo entre la gente, y me encontré con que era un grupito bastante fiestero y que le gustaba la juerga nocturna y claro, cuando les contaba que ultimamente mis principales aficiones son, ir al cine, cenita y para casa o directamente quedarme tumbado en el sofá, pues comenzaba el cachondeo padre y empezaban a llamarme por el término que da nombre a éste post.

Así que rememorando mis mejores tiempos y cargado de energía juvenil me apunte a su salida antes de que comenzaran las vacaciones de verano, que transcurrió tal que así:

- Primera parada: Terracita y a beber a muerte, esto me suena que yo también lo hacía, así que tampoco estoy tan perdido, "y habrá que comer algo no?" digo yo, me miran con extrañeza y siguen bebiendo, bueno pues venga vamos .... noto que empiezan a perder el control y sobre todo yo empiezo a perder el control, "venga toma algo más, venga invito a ronda de chupitos", no, el chupito, mi gran archienemigo, así que comienzo a utilizar tácticas de camuflaje, es decir, empiezo a tirar los chupitos a la planta de atrás después de un pequeño trago, oye si están tan pedo que no se dan cuenta no es mi culpa, yo ya dije que no quería.

- Comienza el viaje hacia el destino desconocido a la voz de "venga que nos estamos apalancando, vamos a algún sitio", y si creía que estaban borrachos hasta ese momento, cuando se levantan empiezo a darme cuenta de la gravedad de la situación, gente que no se mantiene recta, otros que empiezan a hablar con desconocidos/desconocidas por la calle, comienza el gamberrismo urbano, y yo que no hago más que buscar la excusa perfecta para irme, pero claro, hay que vencer a mi leyenda, sin embargo un palpito empieza a correr en mi interior.

- Tras un viaje que me parece más largo que el que lleva a Tir Asleen e incontables paradas con no aquí no que éste sitio es una mierda (cuando cinco minutos antes habían propuesto ir alli) conseguimos llegar hasta el tugurio elegido para el resto de la noche sin que se produzca ningún altercado grave al margen de una discusión con un chino que vende cervezas por la calle y un par que se despistaron y andaron diez minutos desaparecidos pensando que ibamos en otra dirección, pero antes de entrar algunos quieren hacer un pequeño descanso, pues venga vale, para entrar en calor un porrito? me dicen, bueno hace mucho que no lo pruebo pero tampoco será para tanto, venga dale .... (cinco minutos después) uy no eso ya es muy fuerte para mi, pero chico si te llega a parar la policía con eso la liamos, casi que me voy para dentro.

- Destino final: Discoteca de chunda chunda, la música horrorosa, pero bueno, la cantidad de alcohol ingerida hace que sea más soportable, venga una copita y me empiezo a animar, los pies se me empiezan a mover y todo, pero de repente empiezo a observar que la gente ha ido desapareciendo como por arte de magia, mierda esa era mi oportunidad, pero bueno ahora que estoy con la copa a medias no me voy a ir, bueno venga aguanto un poco más si tampoco se está tan mal, pero de pronto mi sentido arácnido salta, uno de mis compañeros empieza a bailar con una chiquita ligerita de ropa y bastante pasada de copas ya de modo un tanto lascivo, un tío con las venas del biceps tan grande como todo mi brazo mira atrás con cara de mosqueo, se ve venir, se ve venir.

Comienzan los gritos, "pero tú que haces con ese", "solo estamos bailando", "anda y dejala tranquila", primer empujón, una copa vuela, un amigo se mete a separar, un puñetazo al aire, los dos subnormales casanovas en el suelo pegándose, allá que me meto a separar, de repente llega uno de seguridad que me aparta como si fuera una pluma, y es que el novio parece un gnomo a su lado asi que imaginaos yo, los de seguridad nos invitan "amablemente" a irnos, y a mi que me falte el si bwana para evidenciar el que quiero salir huyendo de allí como sea. Cuando conseguimos salir al fresquito me noto un par de arañazos en el cuello, tampoco de demasiada  gravedad, mi compañero de trabajo tiene un bonito corte en el labio, yo dándole vueltas a lo sucedido y allá que veo que se ponen a reirse y a contar sus aventuras "bah porque han entrado los de seguridad que si no les machacamos, vaya puta mierda de sitio, vamonos a otro lado", es mi momento, bomba de humo, distracción, una de las chicas se quiere ir, "no no, yo te acompaño, no te vas a ir sola", "no si cojo un taxi", "bueno pues así compartimos gastos", "venga vale", "¿joder pero no os quedáis?, si ya decimos que eres un viejoven".

Llego a mi casa, las siete de la mañana y no paran de llegarme fotos en toda la mañana al whatsapp del fin de fiesta con chocolate y churros incluido a las nueve de la mañana, consigo dormir apenas tres o cuatro horas porque con ese calor no hay quién pare y me paso un par de días como un zombi hasta que consigo recuperar el sueño perdido de ese día.

Seré un aburrido, seré un viejoven, pero a mi en otra de éstas no me pillan.